viernes, 4 de mayo de 2007
Quién fúe Héctor "El Abuelo" Barragán
Escuela Fútbol Infantil “Hector Barragán”
Porqué se llama Hector Barragán ? Quién es Hector Barragán ?
Muchas personas de la Región se harán estas mismas preguntas, algunos residentes en nuestro querido General Guido también y hasta los niños que hoy lucen orgullosos las remeras con la inscripción de E.F.I.H.B..Cuando escuchan o ven a nuestra Escuelita presentarse en distintos lugares de nuestra región.
Hector Raúl Barragán, a quien muchos de nosotros lo conocimos y cariñosamente lo llamábamos “Abuelo” ó “Abuelo Balestra” fue un ser Muy Especial que a pesar de ser una Persona con “capacidades diferentes” por su afección física contraida por una enfermedad que afectó su motricidad (las piernas) desde su nacimiento, ello no fue un impedimento para convertirse en un amante del deporte al que llevaba en su sangre y el que practico y predico toda su vida y formó parte de sus “tres grandes amores”; el deporte, los chicos y el club de sus amores los gauchos de Boedo San Lorenzo de Almagro, dedicó gran parte de su existencia a enseñar fútbol y pelota a paleta a todos los chicos de nuestra comunidad por generaciones, muchos de ellos hoy padres, abuelos de familia se sentirán identificados, emocionados y hasta un poco melancólico si se nos permite la expresión al ver que su hijo, nieto, sobrino, etc viste los colores de la Escuela con el nombre de este pionero de nuestro deporte.
Creemos que al instituirle su nombre a nuestra Escuela de Fútbol Infantil, estamos pagando una vieja deuda que gran parte de nuestra comunidad mantenemos con él.
Hector Raúl Barragán fue una persona honesta, responsable, carismática y muy particular desde la portería de su entrañable Escuela Nro 1 se contacto siempre con los bajitos y los inició en la sana practica deportiva del fútbol o pelota a paleta, esos chicos fueron creciendo y no fue por casualidad que muchos de ellos integraran Equipos de Nuestra Localidad o de la Zona y que siempre fueran el espejo para los más chicos, que nos iba mostrando desde su trabajo nuestro querido “Abuelo Barragán” y tampoco era digno de perderse con la emoción que contaba acnedotas y a veces hasta con lagrimas en los ojos le escuchábamos decir “ese pibe jugó conmigo” al referirse a alguien que se destacara o ganara algún Torneo.
Hoy el paso del tiempo, no logra borrar algunas frases que marcaron a fuego a generaciones de futboleros locales como: “Hay que cruzar el Aconcagua”...Haciendo referencia al cruce del puente ..“Pibe anda a peinar Pingüinos” ..frase usada generalmente cuando alguien debía retirarse abruptamente de algún entrenamiento por cometer algún exceso...o el “ bueno, a tomar caldo...” palabras que cerraban la jornada de entrenamiento.....Esas frases y algunas que quizás escapan a mi memoria hoy forman parte de nuestro folklore lingüístico local y que cada vez que la oímos nos asaltan los recuerdos del “Abuelo Balestra” porque siempre en alguna reunión familiar, en algún club, en algún lugar de nuestro querido Guido alguien las pronuncia y comienza el ida y vuelta de los recuerdos de vivencias compartidas junto a él.
Sé que tal vez muchos estén de acuerdo con nuestra decisión, algunos otros no tanto, pero si estamos seguros que nadie podrá decirnos que este Señor HECTOR RAUL BARRAGAN, “EL ABUELO”, “EL ABUELO BALESTRA” o como más les guste llamar no hizo nada por nuestro deporte o no sea merecedor de esta distinción...Si hoy habiendo pasado varios años desde mi niñez me vienen al recuerdo los nombres de mis compañeros de la Infancia con quienes compartíamos la misma pasión, el Fútbol, me parece vernos en la cancha vieja, con la mirada atenta hacía “el Aconcagua”(el puente) para ver emerger la figura inconfundible de “el abuelo” para comenzar nuestra practica, y no importaba el calor, el frío o la humedad, los lunes , miércoles y viernes era nuestra cita a las 17.30 has (cuando trabajaba turno tarde en la escuela) o a las 16 has (cuando trabajaba de mañana) y quién no lo recuerda en las crudas tardes de invierno envuelto con su ponchito marrón de vicuña encarando el”Aconcagua” ó aquellas apacibles tardes de verano en manga de camisa y sus llamativos (para nosotros en ese entonces) tiradores infaltables en su vestimenta, siempre impecable de traje azul o negro.
Poco A poco fue convirtiéndose en una Institución dentro de nuestras cortas vidas, qué emoción y cuánto orgullo cuando nos designaba en los recreos para hacer sonar la campana avisando que terminaba el recreo, cuanto respeto y admiración nos hacía sentir con solo mirarnos, tal vez hasta muchos soñamos con un Super héroe con la cara del Abuelo, envuelto en su guardapolvo gris de fajina siempre nos inquietaba su presencia y si se nos escapaba alguna travesura en nuestra mente de niño travieso nuestra mayor preocupación era que no se entere el abuelo, pero mágicamente nada de nuestras vidas escapa a su conocimiento, y venia el sonrojarnos , vergüenza de sabernos descubierto por él y a veces su consejo o reto según cabiera a lo realizado.
Y para cerrar este breve paso por la vida de nuestro querido y entrañable “Maestro” me viene a la memoria una canción de otro elegido, que también por esas cosas de la vida nos dejó, “el potro Rodrigo” ...Como Olvidarlo...Como Olvidarlo
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario